Una mejor preparación para nuestro futuro
Respuesta
Mejorar la eficiencia energética en los edificios y la infraestructura puede ayudar a que nuestras comunidades estén mejor preparadas para afrontar los efectos del cambio climático. Los edificios bien aislados, por ejemplo, están mejor equipados para soportar el calor extremo, lo que reduce la necesidad de refrigeración que consume mucha energía.